Aumento del mentón



Es un procedimiento quirúrgico para reformar o mejorar el tamaño de la barbilla y se puede realizar ya sea insertando un implante o moviendo o reformando los huesos.

Descripción

La cirugía se puede llevar a cabo en el consultorio del cirujano, en un hospital o en un centro médico de atención ambulatoria.

A usted se le tomarán radiografías de la cara y el mentón, las cuales utilizará el médico para determinar qué parte de este último se va a operar.

Cuando se necesita sólo un implante para redondear el mentón:

Usted puede estar bajo anestesia general (inconsciente y sin poder sentir dolor) o le pueden aplicar un anestésico local junto con un medicamento que lo mantendrá relajado y soñoliento.
Se hace una incisión ya sea dentro de la boca o por fuera debajo del mentón. Se crea una cavidad al frente del hueso del mentón y debajo de los músculos y se coloca el implante dentro.
El cirujano puede usar hueso real o tejido adiposo o un implante hecho de silicona, Teflón, Dacron o implantes biológicos nuevos.
El implante por lo regular se fija al hueso con suturas o tornillos.
Las suturas se emplean para cerrar la incisión quirúrgica. Cuando la incisión está dentro de la boca, la cicatriz casi no es visible.
También puede ser necesario mover algunos huesos:

Usted probablemente estará bajo anestesia general.
El cirujano hará una incisión dentro de la boca a lo largo de la encía inferior, lo cual le da acceso al hueso del mentón.
El cirujano emplea una sierra de hueso o un cincel para hacer una segunda incisión a través del hueso de la mandíbula. Dicho hueso se lleva hasta la posición deseada y se fija con alambre o tornillos en el lugar.
La incisión se cierra con puntos de sutura y se coloca un vendaje. Debido a que la cirugía se lleva a cabo dentro de la boca, no se verá ninguna cicatriz.
El procedimiento tarda menos de una hora hasta aproximadamente 3 horas.
El aumento del mentón comúnmente se hace al mismo tiempo que una cirugía estética de nariz (rinoplastia) o una liposucción facial (cuando se quita grasa de debajo del mentón y el cuello).

La cirugía para corregir los problemas de la mordida también se puede llevar a cabo al mismo tiempo que la cirugía del mentón.

Por qué se realiza el procedimiento

El aumento del mentón generalmente se realiza para equilibrar la cara, haciendo el mentón más largo o más grande comparado con la nariz. Los mejores candidatos para el aumento del mentón son las personas con barbillas pequeñas o retraídas (microgenia), pero que tengan una mordida dental normal.

Antes de la cirugía, comente sus expectativas de verse y sentirse mejor con el cirujano plástico, pero tenga en cuenta que el resultado que se desea es el mejoramiento y no la perfección.

Riesgos

Las complicaciones más comunes del aumento del mentón son:

Hematomas
Movimiento del implante
Hinchazón
Otras posibles complicaciones abarcan:

Daño a los dientes
Pérdida de la sensibilidad
Los efectos secundarios poco comunes abarcan:

Coágulos sanguíneos
Infección que algunas veces puede requerir el retiro del implante
Dolor que no desaparece
Entumecimiento u otros cambios en la sensibilidad de la piel
Aunque la mayoría de los pacientes están contentos con el resultado, los resultados estéticos deficientes que pueden requerir cirugía adicional abarcan:

Heridas que no sanan bien
Cicatrización desagradable
Asimetría de la cara
Líquido que se acumula bajo la piel
Forma (contorno) irregular de la piel
La nicotina del cigarrillo puede retardar la cicatrización.

Después del procedimiento

Usted sentirá algo de malestar y dolor que se puede controlar fácilmente con medicamentos.

Puede sentir algo de entumecimiento en el mentón hasta por 3 meses y una sensación de estiramiento alrededor de la barbilla durante 1 semana. La mayor parte de la hinchazón habrá desaparecido hacia las 6 semanas, dependiendo del tipo de procedimiento que haya tenido.

Es posible que tenga que ceñirse a una dieta líquida durante al menos uno o dos días.

Probablemente le retirarán el vendaje externo al cabo de una semana después de la cirugía. Le pueden solicitar igualmente que lleve puesto un dispositivo ortopédico mientras esté durmiendo durante 4 a 6 semanas.

Usted puede reanudar la actividad suave el día de la cirugía y debe poder retornar al trabajo y a sus actividades normales al cabo de 7 a 10 días. El médico o la enfermera le darán instrucciones específicas.